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“I got this feeling that we really ain’t done yet.”
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2004 es un año que en mi corazón quedó grabado como uno de los mejores, por la música que descubrí de todos los artistas que a partir de la etapa final de mi adolescencia, se volverían esenciales en el soundtrack del resto de mi vida. Era la época perfecta para enamorarse del Indie y hacerlo tuyo. Todo se sentía flamante y fresco, como si eras la única persona sobre la faz de la tierra que conocía esa canción que te volaba la cabeza. Ése era mi sentimiento con The Go! Team, cuando escuché “Ladyflash” por primera vez. Desde entonces hasta la fecha no recuerdo haber tenido una conversación sobre esta banda con absolutamente nadie. A pesar de este hecho, llamarlos infravalorados es contradictorio con más de 5 discos en su autoría, son más bien uno de los mejores secretos guardados del verdadero Indie que aún sobrevive gracias a ellos y otros como ellos, que aún siguen dando batalla, siendo la gran diferencia en un mainstream actual lleno de iguales que ofrecen lo mismo.
El camino de The Go! Team para llegar a Get Up Sequences Part One ha sido largo, no solo en sentido musical, también en el personal. Ian Parton estuvo en la producción de este álbum padeciendo de sordera, Ninja ya es madre, ahora son parte del sello Memphis Industries y muchos de los antiguos miembros ya no están en su alineación, ahora se agregan Jessie Miller y Rian Woods del coro de la Detroit Institute of Arts y colaboraron con The Kansas City Girls Choir. Eso sí, su sonido permanece intacto en esa explosión de sus días de juventud, llenos de color, letras juguetonas y ritmos que te sacuden cualquier mal día del cuerpo.
Teniendo en cuenta que su mejor álbum es Rolling Blackouts de 2011, ¿hay alguna diferencia después de 10 años? La hay, pero es sutil. Su Pop sigue cargado de melodías bailables y aunque se han alejado un poco de ese sonido de marching band que los caracterizaba, la estridencia en las guitarras acompañadas de dulces voces femeninas se desarrolla de forma espectacular. Aunque estas 10 canciones son más retraídas, minimalistas y más emocionales que fiesteras, su ejecución sigue teniendo esa efectividad que solo The Go! Team sabe darnos desde 2004 y Get Up Sequences Part One nos deja —sin duda— con ganas de la segunda parte.
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